Leche de coco

El agua de coco es un valioso y nutritivo ingrediente para la preparación de platos de la cocina asiática. En cambio la leche de coco no se elabora a partir de este líquido del interior del coco.

Como se hace:

1. Abrir el coco con cuidado de no derramar el agua de su interior, que reservaremos para otras preparaciones culinarias o bien para beberla bien fría.

2. Extraer la pulpa del coco y triturarla.

3. Colocar la pulta triturada en la licuadora y agregar el doble de volumen de agua caliente.

4. Dejar reposar 5 minutos y licuar a velocidad máxima.

5. Filtramos con un colador el líquido espeso obtenido, presionando todo el tiempo.

6. La pulpa que queda en el colador la podemos reciclar en la preparación de rellenos o postres con coco.

7. La leche de coco espesa, obtenida después de la filtración que se detalla en el punto 5 y que denominaremos "entera" podemos utilizarla para beber o para otras preparaciones.

Si queremos espesarla aún más, a modo de crema, pondremos esta leche de coco en el frigorífico durante dos o tres horas.

Pasado ese tiempo, veremos que en la superficie se concentra la "crema de leche de coco", y lo que queda en el fondo es la "leche descremada".

El verano es ideal para preparar platos, postres y batidos con la leche de coco en todas sus modalidades.

Coco y plátano:

1 vaso de leche de coco desnatada

1 plátano.

Licuar la leche de coco desnatada con el plátano y servir frio en un vaso alto, decorado con sombrillitas. Un batido ideal para recuperar energías después de bailar o hacer ejercicio.

Sorbete del paraiso:

1 vaso de leche de coco

1 manzana rallada

Mezclar los ingredientes y dejar enfriar dos horas antes de servir.

De sabor delicado y aroma exquisito, es un sorbete ideal para una cena romántica.

Licuado frío de coco y zanahoria:

1 vaso de leche de coco entera

2 zanahorias limpias

Licuar los ingredientes y servir frío. En verano, este licuado facilita el bronceado de la piel.